Si tuviera que elegir una máxima que dé cuenta del NeuroCoaching diría: APRENDER A APRENDER ES EL CAMINO. En NeuroCoaching debemos comprender la importancia de desarrollar nuevas habilidades en uno mismo, es decir en el Coach, y en quien consulta, el Coachee. Hay que comprender que, en los procesos de Coaching, prácticamente no se está trabajando en conseguir nuevos puntos de equilibrio, sino que el foco está en asistir a la persona a devenir un cambiante exitoso, es decir transmitir la competencia necesaria para que la persona pueda ajustarse al cambio constante y continuo en que vivimos actualmente.
El NeuroCoaching replantea las herramientas y técnicas del Coaching Ontológico y otros tipos de Coaching, ajustando su forma de aplicación a la luz de los descubrimientos que las Neurociencias aplicadas están desarrollando día a día. Hablamos hace unas semanas atrás de cómo pensamos el proceso de toma de decisiones en general. Son varios los interrogantes que podemos plantearnos… ¿En qué nivel decisional debemos acompañar a nuestros clientes? ¿Cuáles son los mecanismos que favorecen la creatividad de nuestro Coachee? ¿Cómo es posible gestionar las emociones hoy en las organizaciones? ¿Qué más se puede hacer en favor del planeamiento estratégico a la luz de lo que hoy sabemos? Si leyeron la entrada del blog que habla sobre toma de decisiones (clic aquí para verla), saben que debemos trabajar en niveles que hasta ayer no trabajábamos.
Ya no nos es posible trabajar solamente en el plano de la lógica racional. Es imperativo tratar el procesamiento que se da fuera de la consciencia -metaconsciente- y las emociones como disposiciones corporales. El desafío es darle herramientas a quien consulta las 24 horas, no porque tengamos que estar disponibles todo el tiempo, sino porque debe de tener recursos para seguir trabajando en estos planos cuando está en su casa, con sus amigos, durante sus períodos de ocio y no solamente en la oficina.
El NeuroCoaching trabaja en y con el metaconsciente de los clientes, pues debe de enfocarse en el lugar donde se activan los diferentes procesos y no en el coronamiento de estos. Lo cierto es que, para trabajar Planeamiento Estratégico, Creatividad, Gestión Emocional y por supuesto Toma de Decisiones, es necesario enfocarse en el metaconsciente. Debemos trabajar con nuestros clientes de Coaching aquellos ejercicios que facilitan la creación de respuestas sin análisis formal, consciente y racional. Necesitamos cambiar el paradigma cartesiano del “Pienso, luego existo”. Es imperioso saber que la existencia, y junto con ella todo el procesamiento necesario hoy dentro y fuera de las organizaciones, tiene mucho mas de “No pensar” de lo que creíamos. En todos nuestros clientes, lo que precipita dar una determinada respuesta pocas veces tiene un basamento consciente, aunque parezca, y casi nunca es racional, aunque también así parezca.
Todas nuestras experiencias y las experiencias de los demás se inscriben en redes neuronales y dejan huellas permanentes que luego condicionan nuestras conductas. Es sobre estos condicionamientos que trabaja en gran parte el NeuroCoaching. Nuestra tarea es acompañar el desarrollo de la capacidad de aprendizaje permanente en las personas con basamento neurocientífico. No es acompañar a resolver solamente la problemática que nos traen, es además desarrollar en el Coachee la capacidad de aprendizaje permanente en todos sus futuros cambios venideros para su vida. Próximamente traeré algo mas específico sobre los descubrimientos que las Neurociencias están desarrollando en torno al procesamiento Metaconsciente. Los invito a dejar comentarios!